Entre dulce y salado, este plato es ideal para ir “calentando los motores” en una cena especial, con velas, musica y vestidos para la ocasión.
Es un plato muy exclusivo, que no solo combina ingredientes selectos sino también sabores y texturas muy estimulantes. Disfrútalo junto a tu pareja!
Ingredientes
1 conejo
1 cebolla pequeña
50 gramos de piñones
50 gramos de pasas de corinto
½ vaso de vino blanco
½ vaso de vinagre de vino
1 cucharada de azúcar
1 cucharadita de canela
aceite, sal y pimienta negra molida, cantidad necesaria
Preparación
Que el conejo esté troceado en porciones regulares, pásalo por harina, de forma que cubra bien toda la carne. Un truco, mete la harina en una bolsa de plástico y luego los trozos de conejo. Cierra bien la bolsa y sacúdela varias veces. Cuando la abras, la carne estará totalmente cubierta de harina.
En una sartén dora bien los trozos de conejo. Retíralos y déjalos aparte. En el mismo aceite dora la cebolla finamente picada. Cuando esté dorada añade el azúcar y el vinagre. Déjalo que se reduzca durante unos minutos e incorpora el vino, los piñones, las pasas, la canela, la sal y la pimienta.
Revuelve y acomoda los trozos de conejo. Deja reducir nuevamente y, de ser necesario, agrega caldo hasta lograr que el conejo esté cocido y obtener la consistencia deseada para la salsa.
En caso de que la salsa quedara un poco líquida, agrégale una cucharada de harina disuelta en un poquito de agua.
Sírvelo caliente y con todo tu cariño.
Bon profitttt
Si no eres de mucho conejo yo me atrevería con pollo, la receta no se si sería igual, pero a mi me encanta experimentar y sale mal, siempre puedo decirle que la cena soy yo, seguro que no le importa ;o)